La cultura del todo vale


Hacía tiempo que había visto este anuncio, pero lo emiten pocas veces y no lo había encontrado hasta hace poco en youtube. Cuando lo veo me pongo de mala leche. Que un competidor se ría, se alegre de la lesión un rival me parece patético, lamentable y nada deportivo.

No sé cómo vendieron los creativos a Reflex esta idea. Supongo que por los efectos casi milagrosos tras la utilización del espray en el lesionado. Para mí, sin embargo, ejemplifica de forma casi perfecta -sin pretenderlo, aunque no estoy tan seguro- a la sociedad actual: el fin justifica los medios, todo vale con tal de ganar.

Para mí, no. Hay unos límites, una ética, unos principios por los que regirse. Posiblemente mis principios no coinciden, en todo o en parte, con los vuestros. Pero las trampas, las puñaladas traperas, la mentira, no forman parte de la forma de actuar que considero adecuada en la vida. Que cada uno elija el camino que considere más adecuado. Yo no voy a cambiar, aunque suponga seguir solo.

Alba ha empezado a jugar a baloncesto. Mientras, David lleva un año dando la matraca para que le apunte a fútbol. Me gusta el deporte (amateur) que fomenta valores fundamentales: espíritu de equipo, afán de superación, sacrificio, constancia, disciplina, etc. Nadie te regala nada, es cierto. Sin embargo, no valen los atajos para ganar.

Espero que ambos aprendan esa lección. Les servirá toda la vida.

(Banda sonora: Tie Me Up With Jackets - Fight Like Apes)

3 comentarios:

acolostico dijo...

No dejan de repetrinos que hay que ser competitivos.

Pues yo no quiero competir.

Colaborar. Ser eficiente. Lo que quieras, pero por que competir?

Hazlos competir y los tendrás dominados...

Pepi Toria dijo...

Pues que no te pase nada cuando vayas a los partidos... lo peor son algunos padres.

manu dijo...

Acolostico, estoy contigo: yo tampoco quise competir. Eso sí, supuso quedarme fuera de la carrera, pero no me importa. Creo que, en el fondo, salí ganando.
Mientras compiten, se pelean entre ellos, no se dan cuenta de que el enemigo es quien les azuza con la zanahoria.

Bueno, Alba no creo que llegue a competir. Sería dentro de dos cursos y no llegan al número mínimo de niñas para formar equipo de competición. ¿David? No sé qué hará el final...
Sí, el problema son/somos los padres.